Hablamos con la Dra. Mª Cruz Castellanos Ortega, psicóloga clínica, psicoterapeuta, psicoanalista y Doctora por la Universidad de Valladolid con la mención Cum Laude, que tiene su consulta en uno de los espacios del Vivero de empresas municipal (C/ Arias Dávila 1, Segovia)
Con una sólida formación y vocación en ayudar a mejorar la calidad de vida de los demás. Desde sus inicios en Terapia Ocupacional hasta su especialización en Psicología y Psicoanálisis, Mª Cruz Castellanos Ortega ha dedicado más de dos décadas a la psicoterapia, enfocándose en adultos, niños y familias, además de su labor docente en diversas universidades.
P.- ¿Qué te motivó a convertirte en psicóloga y en qué ámbito de la psicología estás especializada?
R.- Mi motivación siempre ha sido el deseo de ayudar a las personas. Inicialmente, estudié Terapia Ocupacional y trabajé en ese campo durante varios años en Madrid. Fue allí donde empecé a notar situaciones que no podía abordar completamente, lo que me llevó a estudiar Psicología y especializarme en Psicoanálisis.
Desde entonces, he trabajado en psicoterapia y también en la docencia universitaria, lo que me permite transmitir mi experiencia y conocimientos.
Mi especialización es en psicoterapia con una orientación psicoanalítica, que se centra en los aspectos profundos e inconscientes de la persona.
P.- ¿Cómo aplicas tu metodología y cómo crees que beneficia a tus pacientes?
R.- Este enfoque permite una comprensión más completa de los problemas del paciente y facilita un cambio más duradero.
La orientación psicodinámica ayuda a los pacientes a entender las raíces de sus problemas, lo que les permite manejarlos de manera más efectiva y mejorar su bienestar general.
P.- ¿Qué consejos darías a alguien que está considerando buscar ayuda psicológica, pero siente cierto estigma al respecto?
R.- Hablar de tus problemas y buscar ayuda no es un signo de debilidad, sino de valentía; permite un afrontamiento eficaz de los problemas y un autoconocimiento que mejora el bienestar personal a largo plazo.
Además, cada vez más personas hablan sobre su experiencia en terapia, lo que ayuda a normalizar la búsqueda de ayuda psicológica.
Mi consejo es que vean la terapia psicológica como una herramienta para mejorar su calidad de vida, similar a cómo acudirían a cualquier otro profesional de la salud cuando existe un malestar físico, como al médico si hay problemas digestivos o al fisioterapeuta por una lesión física.
"La terapia psicológica es una herramienta para mejorar la calidad de vida, similar a cómo se acude a cualquier profesional de la salud cuando existe un malestar físico"
P.- ¿Existe integración de la tecnología en la terapia psicológica o es un mundo ‘offline’?
R.- La tecnología ha encontrado su lugar en la terapia psicológica, aunque de manera limitada en mi práctica.
Durante la pandemia, muchas sesiones se realizaron online, y en casos de distancia geográfica significativa, continúo ofreciendo sesiones virtuales.
Sin embargo, creo firmemente en la importancia de la presencialidad, especialmente en las fases iniciales del tratamiento.
Las nuevas tecnologías puede ser una herramienta útil, pero no reemplaza la conexión y el entendimiento que se logran en persona.
P.- ¿Cómo te cuidas emocionalmente para poder brindar apoyo a tus pacientes de manera efectiva?
R.- Cuidar de mi bienestar emocional es fundamental para poder apoyar a mis pacientes.
En mi formación como psicoterapeuta, además del estudio teórico, he realizado una formación práctica con mi propio proceso terapéutico, lo que me ha permitido entender y manejar mis propios desafíos emocionales.
Además, practico hábitos saludables como una buena alimentación, ejercicio regular y mantener relaciones personales significativas.
P.- ¿Qué perfiles acuden a tu consulta y cómo llegan hasta ti?
R.- Antes acudían más mujeres, estaban más dispuestas a pedir y recibir ayuda, así como ofrecerla.
Actualmente, vienen todo tipo de personas: adolescentes, jóvenes, adultos, hombres, mujeres… Las personas mayores son el público menos frecuente.
No obstante, la edad no debería influir en la toma de decisión de acudir a terapia. Hay personas adultas, pero jóvenes, que después del proceso se preguntan “por qué no habré venido antes” para mejorar en su vida.
Yo pienso que la vida no es como una piscina, sino que la vida es como el mar. El objetivo no es controlar los problemas que hay a mi alrededor, sino saber moverse entre las olas para no ahogarse.
"La vida no es como una piscina, la vida es como el mar. El objetivo no es controlar los problemas que hay a mi alrededor, sino saber moverse entre las olas para no ahogarse"
P.- ¿Cuál es el proceso terapéutico y cuánto dura?
R.- Todo comienza con una pregunta fundamental: “¿Qué te ha traído hasta aquí?”
Esta pregunta inicial es clave para abrir el diálogo y permitir que el paciente exprese sus motivos para pedir cita con un psicoterapeuta.
A partir de ahí, se exploran los síntomas, la duración de los mismos y cualquier otro aspecto relevante que pueda influir en el bienestar del paciente.
Esta primera toma de contacto es esencial para establecer una relación de confianza para poder diseñar un plan de tratamiento adecuado a las necesidades específicas del paciente.
Este plan puede variar en frecuencia y duración según las necesidades del paciente, pudiendo ser una sesión semanal, quincenal o incluso más frecuente en casos que requieran un abordaje más intensivo.
P.- Después de casi un año en el despacho, ¿Qué tal es la experiencia aquí? ¿Qué es lo mejor que ofrece el vivero?
R.- La ubicación es excelente, es un entorno muy tranquilo. Además, el espacio incluye mobiliario y el mantenimiento de las zonas comunes.
Además, el precio por el alquiler de este despacho es muy asequible e incluye luz y calefacción, lo cual es un factor clave para estar aquí.
Me sorprende que la gente no conozca los viveros de empresas, incluso yo misma me enteré por casualidad al pasar por esta calle.
Lo que es la tramitación electrónica fue un poco complicada, pero con ayuda accedí a la licitación del espacio.
