“Del trazo a la luz” es el título de esta muestra de fotografías obtenidas a partir de los negativos del fotógrafo Roberto Kallmeyer, que se podrá visitar hasta el 11 de agosto
La sala de exposiciones de la Alhóndiga, dependiente del área de Cultura del Ayuntamiento, acoge “Del trazo a la luz”, una colección de fotografías obtenidas a partir de los negativos del fotógrafo y técnico en artes gráficas, Roberto Kallmeyer, de la serie de grabados elaborados por el pintor Francisco de Goya sobre la tauromaquia.
Estos negativos son parte de la serie que Kallmeyer realizó a finales de los años 50 por encargo del editor Rafael Casariego, quien quería llevar a cabo una edición facsímil de esta serie de grabados de Goya. Con el objetivo de conseguir la mayor fidelidad posible con el original, Kallmeyer fotografió las planchas de cobre del pintor depositadas en la Calcografía Nacional, en vez de hacerlo partiendo de los originales en papel, consiguiendo unos negativos que el propio fotógrafo describió así: “Serie de 44 negativos fotográficos de la serie La Tauromaquia de Goya, impresionados sobre película de reproducción de tono continuo por exposición directa de las láminas de cobre mediante cámara fotográfica de gran formato equipada con prisma en el objetivo, con el fin de obtener la imagen invertida para posteriormente utilizar estos negativos de máxima fidelidad en la confección de las planchas de fototipia o beliotipia que se estampan directamente al papel previo entintado en las máquinas lano-cilíndricas correspondientes”.
En el año 2014, el especialista en documentación fotográfica y comisario de la exposición, Aku Estebaranz, depositó estos negativos en la Filmoteca de Castilla y León con el fin de dar a conocer la existencia de este documento tan relevante para la historia del arte español.
Esta serie de negativos fotográficos son los únicos que nos muestran las planchas de cobre originales de Goya entintadas y a su mismo tamaño, acercándonos de manera asombrosa a las técnicas de grabado utilizadas por el artista de Fuentedetodos en la creación de su serie de estampas taurinas, descubriéndonos su maestría en cada detalle de sus trazos, según ha señalado el comisario de la muestra.
La Tauromaquia es la tercera de las series de la obra gráfica de Goya y, junto con Los Caprichos, fue comercializada bajo la supervisión del propio artista. Goya trabajó las planchas de cobre alrededor de 1815, todavía afectado por los episodios de la guerra de Independencia de los que fue testigo directo. Esa violencia vivida se transmite a sus estampas taurinas rompiendo la imagen tradicional que se tenía de los festejos taurinos. El artista realizó un verdadero despliegue de las técnicas de grabado en esta serie en la que sorprende por un lado su calidad técnica y compositiva y por otro por los aires de modernidad que destilan sus imágenes.
El concejal de Cultura, Juan Carlos Monroy, ha destacado durante la inauguración de esta muestra que “hace 200 años no existía la fotografía, pero existía Goya y 100 años después también existió Kallmeyer para hacernos ver con la fotografía lo que vieron los ojos de Goya, al que podríamos considerar el primer fotógrafo de la historia”.
La exposición “Del trazo a la luz” se puede ver en la sala de la Alhóndiga hasta el 11 de agosto e incluirá varias visitas guiadas.
